El refugio en sí es uno de las más pintorescos de la región. Una verdadera obra maestra del tallado del granito: los dinteles, aristas y otros detalles de gran calidad lograron que el edificio no desentonara en el paisaje.

El refugio Frey debe su nombre al reconocido ingeniero Emilio Frey, quien dejo un importante legado en Bariloche. Amplio conocedor de la montaña, fue uno de los miembros fundadores del Club Andino de Bariloche y también tuvo su paso por la intendencia del parque nacional Nahuel Huapi.

Partiremos desde la base del Cerro Catedral tomando la senda normal, transitaremos increíbles bosques de Coihues y Lengas hasta llegar a la zona altoandino en dónde contemplaremos las maravillosas formaciones de roca.

El trekking se dirige hacia el sur hasta llegar al valle del arroyo Van Titter donde comienza a subir. Tras dos horas de marcha se cruza el puente sobre el mencionado arroyo, para llegar 20 minutos más tarde a Piedritas, parada clásica de descanso. Una hora más y se llega al destino.